El desafío de crear contenidos digitales para las escuelas

Con la irrupción de las computadoras en las aulas, es necesario adaptar los materiales de estudio a la nueva realidad

En la Argentina, muchas escuelas, públicas y privadas, ya cuentan con hardware y dispositivos como tabletas o computadoras dentro de las aulas. Ante tanto recurso tecnológico, el desafío es pensar qué pasa con los contenidos.

En 2015, la editorial Kapelusz, una empresa con 110 años de trayectoria, lanzó una plataforma digital que ya se está usando en más de 250 escuelas del exterior.  

“Las editoriales están empezando a pensar cómo enriquecer el trabajo. Para editores y editoriales es el gran desafío. Los recursos digitales nos permiten abordar cosas que eran muy complejas de incluir y para las que no había espacios en los libros”, explicó Celeste Salerno, directora del departamento editorial de Kapelusz, al programa “Aprendemos juntos” en Radio Arinfo.

La plataforma Educa-inventia es un ecosistema educativo que integra a todas las personas que participan de colegio: directivos, docentes, alumnos, padres. Uno de sus objetivos es formalizar las vías de comunicación entre ellos.

Este software cuenta con una estética similar a un muro de Facebook y está organizado con aulas virtuales. Sus creadores tomaron el modelo de las plataformas universitarias para adaptarlo al nivel primario y secundario.

Desde la editorial se presta a las escuelas un programa de capacitación a cargo de un asesor pedagógico o “mentor en el aula” a medida para directivos y docentes. Se trata de un acompañamiento personalizado que ayuda a integrar las nuevas tecnologías en el trabajo diario. La capacitación dura tres años y tiene como objetivo que la plataforma sea algo cotidiano, que no genere extrañeza entre alumnos y docentes.

Educa- Inventia cuenta con un servicio de mensajería y, además, permite subir archivos y contenidos. Cuenta con libros físicos (no son archivos PDF), acompañados de recursos digitales (como actividades y videos) y actividades interactivas.

Como su creadores advirtieron que la conectividad es uno de los mayores problemas en la Argentina, hicieron que la plataforma funcione también offline.

“Se puede trabajar con los contenidos y actividades sin conexión. Los contenidos se pueden descargar con todos sus recursos asociados. Al conectarse el alumno, los recursos se sincronizan con el docente y las actividades generan reportes. Eso permite un feedback y medir la calificación”, señaló Salerno.

La plataforma, además, es flexible: permite que docentes puedan poner días y horarios para la realización del trabajo. Luego, les llegan las respuestas e, inclusive, la evaluación corregida. El docente tiene la posibilidad de crear sus propias tareas y evaluaciones. Todo queda registrado en la plataforma.

A pesar de tener un servicio de mensajería y de contar con un muro similar al de Facebook, Salerno destacó que en ese entorno no se producen casos de bullying. “Los chicos lo toman como algo institucional”, celebró desde los micrófonos de Radio Arinfo.

Finalmente, la directora editorial planteó que la misión de esta plataforma es preparar a los alumnos para el futuro: “Queremos que sea un entorno conocido para los chicos. Lo digital no tiene techo”

 

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