Un cuchillo criollo, premiado a nivel internacional

El artesano Jerónimo Coll da detalles de la pieza que le valió el reconocimiento del World Craft Council y la Unesco





En el 2014, el soguero tandilense Jerónimo Coll recibió el Certificado de Excelencia que entrega el World Craft Council (WCC), con patrocinio de la Unesco, en reconocimiento a uno de sus cuchillos criollos.

“La pieza que presenté es un cuchillo criollo. La técnica del cabo se llama tejido de lezna, que se hace con tientos de potro. Es un tejido parecido al telar, de urdimbre de trama. En este caso, es urdimbre teñida con cascara de nuez. La particularidad es que este cuchillo tiene un cabo hexagonal, está tejido sobre una madera hexagonal. La guarda es precolombina del noroeste argentino, de la cultura Aguada. Son dibujos que he sacado de un libro, de una recopilación de dos antropólogas sobre culturas precolombinas del noroeste argentino. La vaina es de cuero crudo de vaca, cosida con tiento de potro”, explicó el artesano sobre la pieza galardonada.

Coll aprendió el oficio de soguería y cuchillería de su padre, que es un soguero con mucha trayectoria. Hace unos años abrió su propio taller, pero con una continuidad de la labor de su padre.

“Este cuchillo es una búsqueda por salir de lo clásico que se usa para estos casos, que es lo pampa. En general se usa la guarda pampa, los tejidos de Buenos Aires y del centro del país. En este caso, mi pieza remite a culturas originarias de esta región de antes de la llegada de Colón. Artísticamente es muy interesante. Abre un panorama nuevo a cosas muy lindas, como las guardas o animales como la lechuza o los sapos con sus significados. Abre un panorama nuevo para fusionar con la soguería y conseguir estos resultados”, remarcó el tandilense en diálogo con “Manos de artesano” por Radio Arinfo.

Sobre lo que le valió el reconocimiento del WCC-Unesco, dijo: “Estoy contento. Me congratula mucho. Me encanta haber participado de esto y haber sido reconocido. Estas cosas no te hacen mejor artesano. Le puede tocar a cualquiera porque es algo subjetivo. Sin embargo, me dice que voy encaminado con la búsqueda que le estoy dando a mi trabajo. Es una gran satisfacción. Me ilusiona porque se abren otras puertas”.

“Yo vivo de esto. A la clientela le gusta el tema de los premios, pero es solo eso. Es muy bueno que me haya tocado y le estoy sacando el jugo”, agregó el artesano, quien tuvo la posibilidad de conocer a la ministra de Cultura de la Nación, Teresa Parodi, a partir de su reconocimiento.

Coll trabaja a pedido. Hace solo dos ferias o exposiciones en el año, como la muestra anual de cuchillería en el Bauen, a la que van forjadores y plateros. Recientemente estuvo en la feria en Belo Horizonte.

“Fue una experiencia muy interesante. Fue mi primera salida del país con mis cosas. Moverse, enriquece. Ha sido para mí un año en el que se me han abierto muchas puertas”, destacó el soguero y cuchillero desde los micrófonos de Radio Arinfo.

Y, finalmente, señaló: “Hacer una mesa para exposición en ferias me lleva tiempo extra porque yo trabajo a pedido. Trabajo yo solo y a veces me ayuda un gran amigo. Estoy cómodo y prefiero seguir de esta manera, mi idea no es hacer producción en cantidades sino tratar de ir maximizando la calidad e ir buscando el trabajo más específico. Para eso, busco al público que consume lo que hago”.

 


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