Forster: “Una de las deudas de la democracia es la reforma policial”

El filósofo analizó el impacto de los acuartelamientos de las fuerzas provinciales y dio cuenta de los nexos entre estas y la delincuencia

Durante los primeros días de diciembre, el país se vio conmocionado por una serie de protestas policiales que, prácticamente, dejaron las zonas liberadas para el avance de los saqueadores que generaron disturbios de consideración. Aunque en la Ciudad de Buenos Aires no hubo saqueos, la violencia dijo presente con los desmanes que generó un grupo de “hinchas” de Boca en los festejos por el día del simpatizante del club.

“Hay una profunda trama antidemocrática, autoritaria y corrupta al interior de todas las policías provinciales, que da cuenta de una deuda pendiente por parte de la democracia. A 30 años de su recuperación, queda claro que las agencias de seguridad están atravesadas por vínculos delincuenciales, con tramas de violencia, chantaje a las sociedad y liberación de zonas para amplificar saqueos previamente organizados”, sostuvo el filósofo y ensayista Ricardo Forster.

El ex candidato a diputado por el Frente Para la Victoria aseguró que este “no es un tema menor” y consideró que está relacionado “a las nuevas formas de ‘neo golpismo’ en Latinoamérica”.

“Hoy las policías son las que perturban más seriamente la convivencia y la estabilidad y tienen un poder de fuego y de daño muy grande”, planteó.

En diálogo con “Ríos de tinta” por Radio Arinfo, Forster criticó a los dirigentes opositores al gobierno y los acusó de tener “una visión minúscula y peligrosa” sobre estos hechos de violencia y señaló que “lejos de ser algo favorable para su proyecto, estos episodios debilitan estructuralmente la vida de la democracia y de las instituciones en nuestro país”.

El filósofo también habló sobre los hechos de violencia ocurridos en el Obelisco porteño en el marco por los “festejos” del día del hincha de Boca: “Allí hubo complicidades directas e indirectas de funcionarios y dirigentes del fútbol e ineficacia por parte de la Policía Metropolitana”.

“Hay una mezcla de lumpenaje ligado al negocio delictivo al interior de las barrabravas, con capacidad de mover a ciertas zonas marginales y, a su vez, con permisividad de las estructuras policiales. Hay un vínculo viscoso entre dirigentes de los clubes, estructuras políticas y trama policial, el cual configura uno de los nudos más perversos de este sistema”, agregó.

Luego, analizó: “La idea de todo esto es debilitar cualquier proyecto que busque mejorar la calidad de vida de los que menos tienen en nuestra sociedad. Esto se vincula a la violencia y a la generación de una sensación de caso y de inviavilidad. En el fondo se busca eso: que la sociedad perciba que estamos desprovistos de todo, que no hay ley, que no hay convivencia, que todo es un desastre. Se trata de generar un debilitamiento del proceso llevado adelante en los últimos años que implica la mutación de las estructuras productivas, una gran disputa por la distribución del ingreso y la renta y la democratización y ampliación de derechos”.

“La policía es cómplice de esto cuando opera, como en las últimas semanas, a favor de la lógica del saqueo democrático. Tiene el monopolio de la fuerza pública y utiliza esa capacidad de violencia para acuartelarse, liberar zonas y promover saqueos, en el marco de una reivindicación salarial. Eso define a gran parte de las estructuras policiales y es un saqueo de los derechos y de las libertades”, opinó Forster desde los micrófonos de Radio Arinfo y reiteró que “una de las deudas es reformar profundamente a las policías”.


Escuchá "Ríos de tinta" los sábados de 10 a 13 hs. por www.arinfo.com.ar 

Seguinos en Twitter: www.twitter.com/RadioArinfo