Cómo comer bien en invierno sin engordar

Algunos tips y consejos para ingerir alimentos calóricos y saludables sin subir de peso

El invierno y el frío traen ganas de comer mucho. El cuerpo pide calorías para compensar al pérdida de calor, pero la vita agitada y la falta de tiempo hacen que nos equivoquemos y terminemos eligiendo alimentos que no son buenos para nuestra salud.

“El cuerpo, cuando llegan temperaturas más bajas, necesita recibir mayor cantidad de energía y, una de las posibilidades para adquirirla, es a través de la alimentación. Hay que tener cuidado con los alimentos más calóricos, porque también aumentan el peso corporal. Entonces, hay que ver cuáles son las opciones más saludables, que nos mantengan en una temperatura adecuada y en un peso saludable”, explicó la nutricionista Andrea Miranda.

Ya desde el inicio, la profesional dio algunos consejos para la elaboración de comidas saludables y calóricas: “En esta época del año, hay determinados alimentos que podemos llegar a encontrar y lo importante es saber cómo combinarlos. En lugar de ensaladas, podemos hacer panachés de verduras y las frutas frescas las podemos comer en compotas. Eso nos va a dar vitaminas y minerales que son muy importantes y, al estar en preparaciones con mayor temperatura, aportan calor al organismo”.

Hay ciertos mitos respecto a algunos alimentos como, por ejemplo, el chocolate: “Es uno de los alimentos que las personas empiezan a consumir más en invierno. La realidad es que no hay alimentos malos o buenos, lo importante es la cantidad y la calidad. Los chocolates tienen grasas saturadas, que son las provenientes de los animales y que son las que, en exceso, generan patologías cardiovasculares, colesterol o triglicéridos elevados. Es por eso que hay que evitar consumirlos en exceso”

“Con respecto al vino, se recomienda consumir un vaso equivalente a los 14 gramos en las mujeres y dos vasos, es decir 28 gramos, en los hombres. El tema es que el alcohol aporta calorías y, sobre todo, de las vacías. Es decir, las que no aportan nutrientes al organismo. Es por eso que el consumo excesivo del mismo generará un aumento de peso con todas las complicaciones asociadas al sobrepeso y la obesidad”, planteó Miranda en diálogo con “Entre vos y yo” por Radio Arinfo.

Otra de las cosas que se suele consumir mucho es la comida chatarra, respecto a esto la nutricionista advirtió: “Esa es una de las causas que hizo aumentar la cantidad de obesos mórbidos en Estados Unidos, junto al sedentarismo. Se puede consumir una vez cada tanto, no solo porque hace aumentar de peso, sino que también lleva a incorporar nutrientes no ventajosos para la salud como grasas saturadas, sal, condimentos y azúcares”.

“Siempre que elijamos alimentos debemos evaluar cuáles son sus beneficios y desde qué lugar los comemos, es decir, si es desde una ansiedad, porque tenemos muchas reuniones sociales, etcétera. Lo importantes es empezar a elegir la opción más saludable. Por supuesto que podemos elegir algún alimento más calórico, pero de manera eventual, no habitual”, recalcó la fundadora del Centro Integral de Peso Saludable (CIP Salud).

Al ser consultada en relación a las formas de cuidarnos al concurrir a uno o varios eventos sociales, la especialista precisó: “Los argentinos somos muy sociales, nos gusta reunirnos, salir y pasear. La idea es empezar a quitarnos la idea de que nos reunimos para comer. Nos podemos juntar para estar con nuestros amigos, compartir, disfrutar y relacionarnos a través de otra emocionalidad que no sea la comida”.

“Pero, en caso que haya comida, hay que aprender a elegir lo que más nos gustaría consumir. Si hay pizzas, empanadas, snacks, helado y torta hay que ver qué preferimos comer. La opción que quedó descartada, se puede comer en el próximo evento social. También hay que ser cauteloso en el alcohol, porque eso suma calorías”, sostuvo en declaraciones a Radio Arinfo.

Miranda afirmó que los estudios revelan que un  60% de población argentina tiene sobrepeso y, según la OMS, hay más de 1000 millones de habitantes en el mundo con sobrepeso, una cifra que va en aumento.

“Hay alimentos que, por ser más baratos y rápidos, generan desventajas y alteraciones en el organismo. Por eso, tenemos que aprender a elegir no solo a cantidad, sino también la calidad”, destacó e hizo hincapié en el abordaje multidisciplinario de la obesidad, debido a que se trata de una problemática multicausal.

Finalmente, hizo referencia a los factores que llevan al sobrepeso: “La genética es importante, pero también lo son hábitos alimenticios, la relación con la comida en cuanto a cantidad y calidad, el movimiento y los factores emocionales. Hay que trabajar los disparadores que generan el sobrepeso, porque uno tiende a canalizar y tapar a través de la comida diferentes”.

“El grueso de las personas que sufren sobrepeso es por predisposición genética, por malos hábitos en cuanto a la comida, por el sedentarismo y porque hay que trabajar sus emociones”, concluyó.

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