Las Qunitas, claves para evitar las muertes infantiles por colecho

Luis Parrilla, secretario de Salud de la Municipalidad de Avellaneda, habló de los beneficios que tenía el plan  

La mortalidad infantil se utiliza como un indicador sensible de la calidad de vida de población. Se mide en los menores de un año, a través de una tasa en base a los nacidos vivos por mil. “A menor tasa de mortalidad infantil, mejor calidad de vida”, explicó el Dr. Luis Parrilla, secretario de Salud de Avellaneda.

El médico pediatra precisó que la mortalidad infantil se mide en dos etapas: el periodo neonatal (que abarca las primeras cuatro semanas de vida del bebé) y el pos neonatal (desde los 28 días hasta el año).

En la primera etapa, se ponen en juego factores relacionados al cuidado del embarazo, como la prematurez o el bajo peso. En la segunda, la causa principal de muerte es el colecho, es decir, los chicos que duermen en las mismas camas con sus papás y/o mamás.

“Esto afecta más a niños de baja condición social, pero también aparece en otras clases. También hay muerte súbita por dióxido de carbono en el aire, por los fumadores, por elementos tóxicos en la madre que amamanta o directamente en los niños que no son amamantados”, señaló Parrilla en diálogo con “Rescatados y no tanto” por Radio ArinfoPlay.

Es en ese marco que el profesional aseguró que el Plan Qunita, que otorgaba un cuna de cartón, ropa, pañales y otros objetos a las familias de los recién nacidos, “apuntaba a mejorar los índices de colecho y de síndrome de muerte súbita del lactante”.

“170 mil cunas se entregaron. ¿Macri plantea otra cosa? no. Se discute una medida sanitaria que puede ser mejorable y modificada desde el punto de vista técnico. Hasta países desarrollados tienen este tipo de programas, como Finlandia”, planteó.

Ante la decisión del juez Claudio Bonadío de incinerar las Qunitas por los supuestos peligros que estas representan para los niños, el secretario de Salud de Avellaneda calificó a la medida como “cruel y bárbara” por “dejar sin cuidado a niños menores de un año”.

“Es un juez trasnochado. Esto tiene olor a venganza. Me causa tristeza y enojo. Hay que estar alertas porque acá se discute otra cosa, que no son decisiones sanitarias”, denunció desde los micrófono de Radio ArinfoPlay.

Finalmente, Parrilla sentenció: “Lo importante no es que (la Qunita) sea una caja, sino tener decisiones sanitarias que ayuden a mejorar la calidad de vida de nuestros pibes. Al tomar decisiones, hay que entender que se está dando luz o sombra a determinado porcentaje de la población. Hay que ser muy cuidadoso. Hay ciertas cuestiones que merecen discusiones serias y está bien que podamos reflexionar”.

Escuchá "Rescatados y no tanto" los jueves de 22 a 23 hs. por www.arinfoplay.com.ar

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