“Médico justiciero” vs “Médico asesino”: el debate sobre la mirada legítima

El periodista Roberto Samar analiza la cobertura mediática de uno de los casos más resonantes de la actualidad




Hace algunas semanas, un médico mató a un joven que intentó robarle su auto. El profesional estuvo preso durante algunas horas, pero rápidamente fue liberado. El caso generó un debate en la sociedad respecto de la denominada “justicia por mano propia”.


“Hay una mirada de clase cuando presentamos las noticias como periodistas”, sostuvo el comunicador y docente Roberto Samar y  recordó el casos del Ingeniero Santos como antecedente. En este caso, dijo que “se destaca la idea de que es médico, como si eso cambiara la cuestión procesal, cuando lo único que se hace es generar empatía: si es profesional, genera identificación”.


“En cambio, a la persona que comete el delito, que es sospechoso, se la presenta como el delincuente. Nos invitan con esas coberturas a tomar una posición”, aseguró y planteó que el mote de “médico justiciero” solo “legitima la mirada de una sociedad dividida entre el sector de los buenos, por tener determinada clase social, y los malos, que son los más empobrecidos”.


En diálogo con “Nada personal” por Radio ArinfoPlay, Samar señaló que “hay una violencia que tiene una mirada de clase” y adoptó el concepto del ex juez de la Corte Suprema, Eugenio Zaffaroni, sobre la “criminología mediática”, que implica que en los medios se exacerba la idea de que todo se resuelve violentamente.


“Eso también se va naturalizando en la industria del entretenimiento, con las películas, series y videojuegos. Esta idea, en realidad, es una construcción cultural. Hay otras cosmovisiones o formas de vida que plantean los conflictos de otra manera: cuando una persona se equivoca, no se apela a la violencia”, agregó.


Asimismo, el periodista afirmó que hay una violencia invisibilizada y naturalizada, que es “la que padece permanentemente la persona en situación de pobreza, con la discriminación por parte de la sociedad”. Asimismo, expresó que, en sociedades desiguales, “la violencia estatal y la violencia en el delito son dos caras de una misma moneda””, por lo que “hay que construir sociedades más equitativas y más inclusivas”.


A pesar de que en Argentina no se puede instaurar la pena de muerte, por tratados internacionales y pactos que lo impiden, hay muchas personas que la piden ante el conocimiento de hechos como el del médico. Sobre esto, Samar explicó: “Estadísticamente, está demostrado que no es el camino. Las tasas de homicidios son más elevadas en aquellos estados que tienen pena de muerte. Si queremos construir una sociedad menos violenta, tenemos que crear caminos que no tengan que ver con la violencia estatal, sino con la construcción de espacios de inclusión”.


Finalmente, hizo referencia al hecho de que, cuando se conoció que el médico Villar Cataldo tenía otros delitos previos, se comenzó a puntualizar mediáticamente que no había nacido en Argentina, sino que era paraguayo. Samar manifestó que los inmigrantes suelen ser un “chivo expiatorio” en los que “se canalizan responsabilidades” y recalcó que el 95% de los presos en el país son argentinos.


“Hay una construcción de un nosotros y un ellos desde una mirada eurocéntrica, clasista y racista que incide en cómo pensamos la seguridad y que nosotros, como periodistas, fortalecemos”, concluyó en forma de autocrítica desde los micrófonos de Radio ArinfoPlay.




Escuchá "Nada personal" los sábados a las 17 horas por www.arinfoplay.com.ar

 

 


 
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