Los desafíos de los procesos electorales en América Latina

Juan Pablo Pozo, titular del Consejo Nacional Electoral de Ecuador, apuesta a fortalecer las democracias en la región a través de la cooperación

En este año 2015, diversos países de América Latina afrontarán procesos electorales. Algunos de ellos serán Argentina, que elegirá un nuevo presidente, y Venezuela, que celebrará elecciones parlamentarias. En ese marco, Juan Pablo Pozo,  presidente del Consejo Nacional Electoral de Ecuador, planteó que lo importante es “hacer procesos electorales más confiables, eficientes y transparentes”.

“Hay un punto de acuerdo en la región: las instituciones electorales, ante nuevos proceso o incorporación de tecnologías, deben abrir las puertas. No debe ser algo que se resuelva entre cuatro paredes: los procesos deben ser socializados con todos los actores. El fortalecimiento de las democracias es un compromiso colectivo, por lo tanto, hay que requerir la participación de la ciudadanía, el control social y la participación de las organizaciones políticas de manera crítica, pero también constructiva y propositiva”, planteó la máxima autoridad electoral de Ecuador.

En diálogo con “Noticias electorales de América Latina” por Radio Arinfo, Pozo explicó que la incorporación de la tecnología en el voto es uno de los mayores interrogantes que hoy se plantean en la región. Algunas de las preguntas que surgen en torno a esta temática son: ¿Es conveniente o no para las sociedades modernas? ¿Sirve para transparentar y mejorar prácticas electorales?

“Hay distintas experiencias mundiales: en ciertos lugares, nunca se llegaría a un voto o escrutinio electrónico, y en otros los sistemas están totalmente automatizados. Hay que buscar puntos de equilibrio y tener en cuenta las particularidades de cada sistema electoral”, sostuvo y recordó que, en las elecciones seccionales de 2014 en Ecuador, más de un millón de electores votaron de manera electrónica.

En ese marcó, afirmó que desde el Consejo nacional Electoral están buscando “una solución informática que apoye a todo el país, no a solo un sector ni a una sola provincia” y que el objetivo es lograr una entrega de resultados “ágil, oportuna, confiable y auditable por organizaciones políticas”.

Asimismo, Pozo dijo que, de cara a las elecciones presidenciales de 2017 en Ecuador, se han establecido ejes estratégicos de trabajo muy claro con el fin de “encontrar soluciones que permitan entregar resultados en el menor tiempo posible”.

“Para eso hacemos hincapié en el concepto de soberanía electoral, que implica que las organizaciones electorales tengan capacidad propia de generar procesos electorales que no dependan de otros organismos ni de instituciones privadas y, a la vez, asegurar la integridad de los datos y la seguridad informática”, agregó.

El titular del Consejo Nacional Electoral de Ecuador también apostó a la cooperación electoral internacional y lo definió como “un reto” la posibilidad de emprender proyectos de forma bilateral o multilateral en la región para que “sistemas que dan resultado en ciertos países puedan ponerse a consideración de otras sociedades para mejorar prácticas electorales y fortalecer sus democracias”.

En ese marco, destacó la actividad de los organismos electorales que hacen misiones de observación y acompañamiento en elecciones de países vecinos y la asesoría técnica entre organismos de países como Argentina, República Dominicana, Paraguay y Haití.

Finalmente, Pozo también instó a fortalecer el Consejo Electoral de la Unasur, el cual está compuesto por 12 países de la región.

“Nuestras democracias son mucho más activas y más dinámicas que antes. Estamos en procesos electorales permanentes. El objetivo común es mejorar las prácticas y fortalecer las democracias, que no deben excluir a nadie”, concluyó el dirigente ecuatoriano desde los micrófonos de Radio Arinfo.
 
 

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