“Apartar a las maestras de Agustín es violencia institucional”

Lo afirmó María Elena Naddeo, sobre el caso de las docentes porteñas separadas de su cargo luego de que un alumno fuera asesinado por su padrastro

La muerte de Agustín, de cinco años, a manos de su padrastro sacudió a la comunidad escolar del Jardín de Infantes número 2 de Flores. La situación se profundizó cuando la directora y la maestra de la sala a la que acudía el niño fueron separadas de sus cargos provisoriamente.

María Elena Naddeo, directora del Centro de Atención de Niños, Niñas, Adolescencia, Género y Diversidad de la Defensoría del Pueblo dela Ciudad de Buenos Aires, calificó a esta acción dictada desde el ministerio de Educación porteño como una forma de “violencia institucional”.

“El Gobierno de la Ciudad ha desplazado el eje de la discusión. En vez de preocuparse por cómo evitar más muertes de niños en la Ciudad y de cómo generar campañas de prevención de malos tratos y abusos, hace una medida drástica como es la separación de la directora y la maestra de la sala. Se utilizó una herramienta del estatuto del docente que se aplica cuando el docente es acusado de violencia o cuando hay un problema de corrupción. Es una medida extrema separar del cargo a un docente que llega por concurso y por orden de mérito. Es un castigo muy grande y muy mal visto en la comunidad educativa”, sostuvo la ex Legisladora porteña.

Asimismo, planteó: “Hay mecanismos que tienen los maestros para detectar situaciones de maltrato y abuso. En el caso de Agustín, hay una serie de circunstancias muy particulares que no fueron tenidas en cuenta con el Ministerio, que lanzó una medida drástica. Con eso, intentaron buscar un culpable para des-responsabilizarse de otras acciones que el Gobierno de la Ciudad abandonó hace tiempo. El Ministerio, en lugar de procurar ir al fondo del problema y tratar de acompañar a la escuela en el proceso de reflexión y corrección, prefiere castigar a maestras. Con eso, generó movimiento de protesta muy fuerte porque las dos docentes son muy queridas en la escuela”.

En diálogo con “Puente urbano” por Radio Arinfo, Naddeo también cargó contra el ministro Esteban Bullrich: “Él no es docente y manda a sus hijos a escuelas privadas. Es muy funcional a una política privatista, que subestima la educación pública y desvaloriza el rol del docente y las prácticas tradicionales de inscripción. Los mismo pasa en otras áreas sociales del Gobierno de la Ciudad, en las cuales hay una mirada aristocratizarte, de desprecio hacia lo público y de considerar que lo que se hace, se hace mal. Los criterios de gerenciamiento privado les son más naturales, agradables y gratificantes”.

Respecto a lo que ocurrió en el Jardín de Flores, la integrante de la defensoría con contó que, cuando la maestra vio las lastimaduras de Agustín, habló con la madre, la citó y tuvo largas entrevistas. La mujer aportó certificados de un pediatra y un dentista que justificaban las lesiones.

“Poder profundizar y descubrir en el discurso de la mamá o del niño que hay encubrimiento u ocultamiento de la violencia intra-familiar requiere cierta especialización que aquí no estuvo. Además, este nene estuvo muy poco tiempo en la escuela porque venía de vivir en Villa Gesell, por lo que la maestra apostó a creer a la mamá y al nene. Todos coinciden en que a Agustín se lo veía feliz en la escuela. Es una tragedia que puede pasar cuando el diagnóstico no es inmediato. En este caso, faltó una mirada más especializada”, admitió Naddeo.

En ese marco, aseguró que los equipos de orientación escolar que deberían haber intervenido “no existen”. “Hace diez años, había 15 profesionales, entre asistentes sociales, psicólogos y psicopedagogos por distrito escolar, que son 21. Ya en ese momento no daban abasto. Hoy, tienen cinco personas”, denunció.

“Ellos reciben consultas de docentes, intervienen ante conflictos, hacen diagnósticos y capacitan a docentes en temas de problemas de aprendizaje, violencia intrafamiliar o bullying. Si estos equipos son pequeños, solo aparecen en las emergencias. Acá faltó este ida y vuelta con los profesionales”, señalo la ex Legisladora.

En esa línea, hizo hincapié en que “se necesitan más dispositivos” y recordó que presentó un proyecto en la Legislatura porteña hace unos años para crear en cada escuela primaria y de nivel inicial cargos de psicopedagogía y psicología, especializados en temas de violencia y malos tratos, educación sexual, entre otros. “Lo estamos retomando desde la Defensoría porque en su monto fue archivado por falta de consenso”, comentó.

Finalmente, Naddeo recalcó desde los micrófonos de Radio Arinfo: “La directora y la maestra insisten en que no vieron señales de violencia intrafamiliar. Ese diagnóstico incompleto, equivocado o real, no habilita una sanción de este tipo, sino que habilita a procurar nuevos canales y formas de capacitación para detectar tempranamente la violencia intra-familiar. Hay que tener una mirada más alerta y evitar las situaciones de violencia tan graves que sufren niños, niñas y adolescentes”.

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