Aumenta en la Argentina el consumo de Clonazepam

Cada vez más personas de todas las edades consumen este ansiolítico. Farmacéuticos piden más controles

Cada vez es más frecuente escuchar que personas, aún sin patologías que lo ameriten, consumen distintos tipos de ansiolíticos. Muchos consiguen los medicamentos de manera legal, prescriptos por los médicos, aunque otros apelan a la ilegalidad para automedicarse y hasta para utilizarla como una droga recreativa.

“En los años 90’, Argentina estaba cuarta en el consumo mundial de psicotrópicos. El país siempre tuvo un nivel muy alto. En esa época, el clonazepam se usaba exclusivamente para gente que sufría pánico. Hoy, es de uso corriente. Hay un aumento increíble de su consumo”, aseguró el farmacéutico Walter Godoy, quien trabaja en la localidad de Matheu, partido de Escobar.

En diálogo con “Un punto azul pálido” por Radio ArinfoPlay, el profesional aseguró que el consumo de ansiolíticos creció en personas de todas las edades: “Los abuelos, por supuesto, vienen con su receta archivada rosada de PAMI, pero los viernes, sobre todo, los chicos vienen a comprar con recetas truchas y no les vendemos”.

Las marcas que más se piden de clonazepam son Rivotril (el más nombrado por ser uno de los primeros en salir al mercado) y Clonagin. También tienen mucha salida el Diocam y el Neuryl.

En contraposición, cayeron en desuso otros ansiolíticos como el Lexotanil (bronazepam) y otros productos que en los años 90’ tenían mucha salida, como el Valium.

Tampoco tienen mucha salida en las farmacias productos naturales como la valeriana o el té de tilo. “Los piden muy poco. Lo hace más la gente grande, pero no salen tanto. Hay gente que no puede dormir y sabe que, si se toma un Clonagin, duerme ocho horas corridas”, confió Godoy.

El farmacéutico atribuyó este aumento del consumo de ansiolíticos a la carga de estrés con la que viven las personas y a las enormes cargas de horario de trabajo.

Finalmente, consideró que los médicos “están recetando demasiado” el clonazepam y que lo hacen solo a pedido del paciente. Es por eso que, desde los micrófonos de Radio ArinfoPlay, pidió mayor conciencia en los profesionales: “La única forma de evitar el consumo es que el médico no lo prescriba. Necesitamos que haya más controles para poder bajar este consumo y que se pidan más requisitos para recetarlo”.

 

Escuchá "Un punto azul pálido"  los sàbados de 12 a 13 hs. por www.arinfoplay.com.ar


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