Cómo es la actualidad en Neuquén, tras la erupción del volcán Calbuco

La provincia patagónica vuelve a padecer la caída de cenizas provenientes de Chile





Luego de la difícil situación que se vivió en las provincias de Neuquén y Río Negro en el año 2011 con la erupción del volcán Puyehue de Chile, la zona vuelve a padecer las inclemencias de un volcán, esta vez el Calbuco.

“Se sabe que los lahares, los ríos de lava, comenzaron a fluir del volcán. Este tenía un solo cráter pero, después de las erupciones del 22 y 23 de abril se produjo una ruptura y ahora tiene seis bocas. Eso permitió descomprimir la actividad del volcán. Se espera una tercera erupción del volcán, luego de las dos del 22 y 23 de abril. No obstante, no se cree que sea de tanta intensidad como las anteriores”, informó el periodista de Neuquén, Santiago Amillano.

El comunicador aseguró que se trata de una “situación especial” y que los pobladores de la zona no están acostumbrados a vivirla. Para saber cómo se desarrollarán la cuestión y qué esperar, desde la provincia patagónica toman la información generada desde el servicio nacional de geología y minería, y el ministerio del Interior de Chile, ya que tienen un “sistema bien articulado de información y vulcanólogos”

En Neuquén y Río Negro, además, se conformaron comités de emergencia conducidos por los propios gobernadores, los cuales están en comunicación permanente con Chile.

“Hay mucha tranquilidad. Por suerte, no hubo pánico en la gente y esto facilitó mucho la información y el cuidado de la gente para con las cenizas.  Hay que recordar que ya nos tocó la erupción del volcán Puyehue en 2011, por el cual hubo ceniza volcánica que afectó a Neuquén y Rio Negro. Eso sirvió de experiencia”, destacó Amillano en diálogo con “Ojos abiertos” por Radio Arinfo.

El periodista recordó que, el pasado domingo, los habitantes de Neuquén debieron ir a las urnas para elegir Gobernador. Los comicios se realizaron aún cuando las fuerzas opositoras habían pedido de manera formal que se suspendieran por la situación en torno al volcán.

“La ministra de Educación dio asueto académico y administrativo a todas las escuelas de la provincia. No hubo actividad jueves y viernes. Estuvo bien hecha la difusión de la información y de los recaudos a tomar. La ceniza no es tóxica, pero es irritante para el sistema respiratorio, por eso era importante que la gente no saliera de sus hogares de no ser necesario. Las recomendaciones del sistema de salud público fueron bien escuchadas, porque no hubo registro de gente que haya entrado por estos problemas a hospitales o clínicas. La gente estuvo muy tranquila y los colectivos estuvieron vacíos a pesar de que había servicio”, planteó el comunicador.

Y, en esa línea, agregó: “Las autoridades trataron de que la gente se resguarde en su casa. No hay clima de paranoia. Excepto el aeropuerto, que estará cerrado por 10 días, están abiertas todas las vías de comunicación en la capital neuquina y se han reabierto rutas a localidades precordilleranas, que recibieron la ceniza más gruesa”. 

“De todas maneras, pasó lo mismo que en 2011: se acabaron los barbijos en las farmacias y hubo problemas con el suministro de agua envasada”, finalizó Amillano desde los micrófonos de Radio Arinfo.


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