“Las mujeres debemos estar en un plano de igualdad y de libertad”

La socióloga Elsa Schvartzman analiza las distintas variantes que adopta la violencia de género y analiza el rol de los medios





El pasado 25 de noviembre se conmemoró el Día internacional de la no violencia hacia las mujeres. Se trata de una jornada que cada año tiene más participación activa por parte de diversos sectores de la sociedad.

“En torno a la violencia hay un grado de visibilización mayor a otras épocas. Hay mayor difusión, se habla, se levantó el silencio de lo privado, se conversa y se discute en las calles, las escuelas y los lugares de trabajo. Hoy se considera que la violencia hacia las mujeres es un problema grave. Pero, por otra parte, vemos un recrudecimiento o se conocen más hechos graves, importantes o dramáticos que llevan a la muerte de muchas mujeres. Son crímenes de discriminación y sometimiento porque son mujeres, lesbianas o travestis. Entonces, es contradictorio y difícil decir si hay mayor visibilización o más crímenes”, planteó la socióloga Elsa Schvartzman en diálogo con el programa “Puente urbano” en Radio Arinfo.

En ese plano, la especialista habló de algunas de las diversas tipologías de violencia de género que existen: “La violencia simbólica es cuando somos negadas o invisibilizadas dese el lenguaje, desde las acciones o desde la participación. La psicológica implica maltrato o el sometimiento cotidiano en las casas, los trabajos o las escuelas. La institucional es cuando hablamos del no reconocimiento de las leyes de igualdad de las mujeres. En cuanto al parto respetado, hubo necesidad de sancionar una ley para que exista”.

“Violencia también es cuando no se cumple la ley de aborto no punible. Es decir, los que ya son legales y que deciden no cumplir algunos sectores de salud y miembros del Poder Judicial. Hablamos de violencia cuando se sigue sosteniendo la ilegalidad del aborto que quita ciudadanía a las mujeres en su poder de decisión y, además, enferma y mata mujeres jóvenes y pobres”, sostuvo Schvartzman, quien también es integrante de la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito.

La socióloga afirmó que todos estos tipos de violencia se ejercen continuamente en el ámbito de lo privado y de lo público, sobre mujeres adultas, niñas y adolescentes.

“Hay otro problema, que es el tratamiento de los medios masivos. Estos no son los culpables de la violencia, pero la repetición sin fundamentos o explicación y la no difusión de la prevención contribuye a que esto lleve a un momento de saturación e ingrese en el terreno de la banalización”, subrayó.

En ese sentido, amplió: “El poder de comunicación y la importancia que tienen en esta época los medios de comunicación masivos, los alternativos y las redes sociales es fundamental. Se trata de la forma de difundir, de cómo se transmite y de cómo se forma un sentido común que puede llegar a ser tan violento como la violencia que se quiere transmitir.  Hay una forma de tratamiento de la información que atenta contra la posibilidad de tener una perspectiva de fortalecimiento de derechos. Habitualmente, se revictimiza a la víctima y se da vuelta a la historia en un tratamiento poco respetuoso que no cuida el derecho a la intimidad de estas mujeres. Esto también es una violencia”.

“Es un aprendizaje constante. La exacerbación del mercado hace que durante horas se transmita y retransmita una noticia. Eso se hace sin contenido, se tergiversa, se pone frente a la cámara a personas que no tienen clara la situación, se vulneran derechos de las víctimas, se publicitan situaciones que deben ser del ámbito de lo privado”, lamentó Schvartzman pero, a la vez, destacó la parición de iniciativas como la Red Par de periodistas con perspectiva de género que “permiten pensar que hay posibilidad de llegar a más gente con una nueva perspectiva y una nueva mirada crítica”.

En esa línea, la socióloga también criticó los mensajes provenientes del mundo de la publicidad: “Se va construyendo un sentido, un sustrato, donde esto se naturaliza y los roles estereotipados se fortifican. Se han levantado campañas sexistas, pero sigue prevaleciendo un supuesto mercado proclive a este tipo de exacerbaciones”.

Finalmente, habló de cómo detectar si una está inmersa en un relación violenta: “Son relaciones en las que a una persona se la subestima, se la desconoce, se la critica constantemente y se le hace burla en pos de un sentido del humor machista y dominante. Todas estas son señales. Sobre todo, cuando una siente que eso no le gusta, le duele, le molesta, se siente controlada y no puede ejercer su propia posibilidad de pensar y de hacer. Todos esos son indicios de dominación”.

“Tenemos que apuntar a relaciones entre las personas sin jerarquía de dominación. Cuando hay posibilidad de dialogo, de discusión de respeto, eso es lo que debe primar desde niños. Debemos exigir la implementación de la Ley de Educación Sexual Integral para trabajar en relaciones igualitarias entre las personas. Es necesario que las mujeres estemos en un plano de igualdad y de libertad”, concluyó Schvartzman desde los micrófonos de Radio Arinfo.
 


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