Los olivocultores sanjuaninos se unen para sacar adelante al sector

Buscan generar lazos para afrontar las problemáticas y generar valor agregado a su producto

En el año 2011, los productores de aceituna de la provincia de San Juan advirtieron que el sector estaba atravesando serios problemas económicos. En ese marco, comenzaron a reunirse de manera informal. Con el correr de los meses, los encuentros se hicieron más frecuentes y así nació la Asociación de Olivocultores Familiares de San Juan.

“Comenzamos viendo los problemas reales del sector y pensado cómo podían ser combatidos para darle una mejor calidad de vida a productores.  El problema principal era la baja rentabilidad del producto. El tema era que no podíamos arrancar los árboles y movernos a otra actividad: para que un árbol tenga productividad tiene que tener, al menos, 7 u 8 años, y los nuestros tenían 30, 40, 50. Es por eso que había que encontrar alguna solución”, recordó Juan Tapia, actual Presidente de la entidad.

En ese sentido, agregó: “Comenzamos a pensar y nos dimos cuenta de qué alguien se estaba quedando con una parte importante de nuestro esfuerzo. El producto en nuestra finca valía 2.60 y en las góndolas 30 pesos. Queríamos ver qué pasaba en el medio”.

“Así surgió la idea de darle valor agregado al producto y para eso brindamos apoyo desde la Asociación con cursos y capacitaciones”, contó al programa “Puerto Utopía” en Radio Arinfo.

Actualmente, la Asociación reúne a alrededor de 20 productores familiares de aceitunas de la zona de Pocito. Algunos de los integrantes tiene fincas de una hectárea y otros cuentan con unas diez. En promedio, poseen entre 4 y 5 hectáreas cada uno.

El INTA ha dado una ayuda fundamental a la entidad al firmar un contrato de cooperación para que los productores puedan participar, a través de una fábrica ya montada, de la elaboración de aceite de oliva extra virgen.

Este es el tercer año del proyecto. Nosotros entregamos las aceitunas y dejamos un porcentaje de la producción como pago por el servicio de elaboración. Luego, cada productor retira el producto ya envasado y se encarga de comercializarlo en ferias y diversos espacios”, explicó Tapia.

El productor destacó que han recibido un importante aporte para, el año próximo, abrir su propia fábrica: “Con ella podríamos lograr otro volumen y acceder a otros mercados. La idea de unirnos es esa: abastecer a mercados grandes a nivel interno. Exportar es difícil, porque no damos los volúmenes y el precio internacional no nos favorece”.

“Lamentablemente, este año la producción será poca por la helada. Quedó solo el 15%, el resto se perdió. Algunos productores recibieron subsidios por parte de Gobierno provincial, pero muchos otros no. Estamos trabajando para que todos puedan ser incorporados”, comentó el Presidente de la Asociación en el aire de Radio Arinfo.

Finalmente, planteó: “Hay una parte que siempre ha lucrado con los pequeños productores y eso son los que nos dicen que esto no va a funcionar. Pero hay que saber filtrar las opiniones: hay gente de otros sectores que nos ve con buenos ojos y que nos pide asesoramiento. Esta es una idea que está prendiendo. Tenemos poco más de dos años de trabajo. Aún tenemos mucho por hacer”.

 

 

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