Las apuestas dentro del distrito tecnológico de la Ciudad de Buenos Aires

La cámara de empresas que se asentaron en el lugar destaca los avances conseguidos y presenta sus grandes proyectos para el futuro





El distrito tecnológico de la Ciudad de Buenos Aires, que abarca los barrios de Parque Patricios y parte de Pompeya, lleva casi cinco años de funcionamiento. A partir de la ley que lo creó en el 2009, y que se reglamentó un año más tarde, ya se instalaron 100 empresas en la zona y hay otras 80 en obra, próximas a radicarse.

En este marco, se creó la Cámara de Empresas del Distrito Tecnológico de la Ciudad de Buenos Aires (GigaBA) en el año 2011, por la unión de las primeras 13 entidades que llegaron a la zona.

“La promoción que el Gobierno de la Ciudad generó con algunos beneficios impositivos y de otro tipo tiene varios objetivos. La ley es muy clara respecto a la creación y mantención de empleo: las empresas que se radican se comprometen a no despedir gente y, al contrario, a aumentar su nómina de personal”, sostuvo Sebastián Domínguez Dib, Director ejecutivo de GigaBA.

El empresario dijo que el del distrito tecnológico fue el “proyecto más importante de los últimos 50 años en la zona sur”.

“Ha propiciado la radicación de fuentes de trabajo y la llegada de gente joven a vivir a esa zona, que tenía una población muy baja y longeva. Hoy, por ejemplo, hay 13 proyectos de vivienda de edificios con amenitties pensados para gente joven”, ejemplifició.

Domínguez Dib destacó que, desde la sanción de la ley, ya se han edificado más de 400 mil m2, con aportes de inversión privada y pública. Aseguró que en los últimos tiempos ha habido más inversión en materia de obra nueva que en toda la Ciudad junta y que en 2013 se hicieron más escrituras en este distrito que en toda la Ciudad.

“Este proyecto ya no tiene punto de retorno. El Gobierno de la Ciudad hizo la obra pública que se necesitaba y las empresas hicieron una inversión enorme”, planteó en diálogo con “Resumiendo punto cuatro” en Radio Arinfo.

El Director Ejecutivo de GigaBA consideró que la iniciativa del distrito superará a los partidos que puedan gobernar a la Ciudad en el futuro: “Este no es un proyecto político, sino que tiene que ver con el desarrollo del país y de las industrias más elementales que tiene la Argentina. Es indiscutible que nuestra mayor fuente de riqueza es el talento y este está en las empresas de tecnología que están desarrollando para el mundo con una industria sana, verde y limpia. Es una industria que invierte, crece y que todos los años ha dado más trabajo, jamás decreció. Se crean empresas nuevas constantemente. Esto tiene para mucho tiempo más”.

“Este es un proyecto social para la zona Sur. Es importante que se revalorice y se revitalice a esa franja olvidada. Hubo condiciones interesantes y los empresarios acompañaron”, señaló.

El empresario hizo hincapié en el concepto de clúster: “Es una hélice de tres patas, donde está el estado creando condiciones, las empresas invirtiendo y las organizaciones del saber aportando gente.  El primer paso, en este caso, lo dio el estado con la ley y dando seguridad. El segundo, fueron las empresas. El tercero está en obra, que son las universidades. En dos años habrá dos universidades y se sumarán otras como el ITBA, El Salvador y la ORT. Muchas, incluso, ya dan cursos de posgrado en el distrito”.

“Desde la Cámara, hacemos cursos de capacitación gratuitos para gente del barrio que quiera quedarse a trabajar allí. Ya se capacitaron más de mil personas y los hacemos en cooperación con la UBA. También damos talleres para personal de las empresas del distrito que quiera escalar. Generamos todas las condiciones desde el punto de vista de la educación para que la gente se quede”, recalcó desde los micrófonos de Radio Arinfo.

Finalmente, Domínguez Dib habló del ambicioso proyecto en el que están trabajando desde la cámara, en cooperación con otras federaciones y organizaciones: “Creemos que el distrito puede ser un Silicon Valley en el Sur del mundo.  Argentina tiene todas las condiciones para crearlo: talento, universidades, estado, empresas. En un plazo no tan largo, se deben fundar las bases para que esto llegue al próximo nivel”.

“Sería una ciudad tecnológica, un centro al cual la gente de Latinoamérica mire como referente. Implicaría tener un proyecto de país muy orientado a la tecnología, un lugar importante para los emprendedores que necesiten desarrollar nuevas tecnologías, una cuna importante de gente que pueda invertir en ideas nuevas y una fuente de trabajo muy importante”, agregó.

Y, finalmente, concluyó: “No es poco lo que se ha hecho hasta ahora. Están sentadas las bases para algo muy interesante. Es un proyecto que tiene todos los condimentos para ser un clúster de una gran envergadura en la Argentina y en toda Latinoamérica”.
 



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