Gambina: “Levantada la cláusula RUFO, Argentina pagará”

El economista analiza el futuro del país en base al posible ingreso en default. Hizo hincapié en la necesidad de crear una nueva estructura financiera regional

El miércoles será el plazo vencimiento de la sentencia dictada por el Juez Griesa de los Estados Unidos a favor de los denominados Fondos Buitre. De no cumplir con el pago a estos tenedores de bonos, la Argentina entrará en default.

“Es una situación complicada, porque el argumento del Gobierno argentino es que ya ha depositado el pago en el banco de Nueva York y con eso está. Pero, el análisis jurídico dice que para efectuar el pago, el dinero debe entrar a la cuenta de los tenedores de títulos que entraron al canje. El punto de vista del sistema financiero global es que, mientras el pago no entre a la cuenta del bonista, la Argentina entró en default, es decir, no está pagando”, explicó el economista Julio Gambina.

En ese marco, recordó que incluso los grandes medios de Estados Unidos criticaron al Juez Griesa por su sentencia y planteó un nuevo escenario: “Para el poder mundial, es un problema lo que está ocurriendo. Se está induciendo a un país ‘pagador serial’, como le gusta decir al Gobierno, a endurecer su posición. Argentina, si es provocada, podría llegar a suspender el conjunto de los pagos y proceder a una profunda investigación de la deuda. Solo en esas condiciones, se podría hacer una nueva propuesta de pagos de lo que es legítimo y legal, y desarrollar una nueva política económica. Pero yo voy más allá de lo que piensa el Gobierno”.

“El temor del FMI y de las clases dominantes del sistema financiero mundial pasa porque la Argentina sea inducida a ir a un default voluntario”, sostuvo el experto en diálogo con “Puente urbano” por Radio Arinfo.

Gambina también habló de cómo podría influir en el futuro nacional la Cumbre de Jefes yJefas de Estados del Mercosur, que se realizará esta semana en Caracas: “La Cumbre se va a pronunciar solidaria con la Argentina y anunciará tareas a hacer. El tema es que no sean formulaciones diplomáticas, sino que impliquen materializaciones de cronogramas concretos para hacer realidad muchas de las ideas que ya llevan siete años de formuladas como por ejemplo el Banco del Sur, los intercambios con moneda local y la constitución de fondos con reservas de los países para desarrollar contingencias, al estilo de lo anunciado por el BRICS”.

“Al no avanzar una arquitectura financiera modificada en el FMI y en el Banco Mundial, lo que viene desarrollándose es la aparición de bancos nacionales o regionales de desarrollo, en ese marco se inscribe la nueva arquitectura financiera. Es una nueva oportunidad para hacerlo en el Mercosur, más con la Argentina ejerciendo la presidencia Pro Témpore”, consideró.

El economista precisó de qué se trata la famosa Cláusula RUFO: “Se creó para estimular el ingreso de bonistas a los canjes de 2005 y 2010. Se les decía que, si en el futuro se mejoraba la oferta, iban a  recibir la mejor. Así, entró el 92,4% al canje y el resto quedó afuera. Una parte de este último grupo tiene sentencia de pago en Nueva York al 100%. Si Argentina paga la cláusula, que vence en diciembre de 2014, tiene que ofrecerle a los acreedores que entraron al canje lo mismo que le pagaría a los bonistas con sentencia en Nueva York. Es decir, si a los buitres les paga el 100%, a los otros también”.

“Por eso, el Gobierno no quiere negociar con los buitres. Quiere cumplir con la sentencia a partir de enero, cuando ya no haya cláusula RUFO. No se sienta con ellos para que no parezca que es decisión de la Argentina negociar. Solo negocia con el Juez y con el mediador como imposición de la Justicia estadounidense. Pero, levantada la cláusula RUFO, se pagará”, afirmó.

Desde el aire de Radio Arinfo, Gambina expresó que algunos sectores de la oposición como Macri, Massa o Cobos quieren pagar ya, mientras que el Gobierno y otros dirigentes Lavagna o Alfonsín prefieren pagar en enero, cuando caiga la cláusula RUFO.

Finalmente, habló de las posibles consecuencias para la Argentina de un ingreso en default o cesación de pagos: “Se van a potenciar los problemas estructurales que ya existen como la desaceleración de la economía que ya es recesión, sobre todo con fuerte impacto en la industria. Esto se une a una situación social que se expresa en cesantías, despidos y el problema inflacionario. El país está necesitado de recursos fiscales y no transige en la demanda de actualizar el mínimo no imponible de Ganancias. Se puede generar mayor conflictividad social”.
 
 

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