Norberto Galasso: “No enseñar historia es un llamado al apoliticismo”

El historiador critica la reforma curricular de la escuela secundaria que propone el macrismo, la cual eliminaría la materia en los años superiores





El pre diseño de reforma curricular de la enseñanza media de La Ciudad de Buenos Aires presentado por el partido gobernante ha generado gran polémica. Sobre todo, porque reduce los contenidos de la materia Historia y porque directamente la elimina de los últimos años de cursada en ciertas orientaciones.
 
“Esta decisión del gobierno porteño forma parte del criterio que tiene el liberalismo oligárquico, que es la ideología que tiene Mauricio Macri, a pesar de que no lo diga explícitamente. Es la idea de que no hay que indagar en la historia, en la identidad nacional ni hay que saber quiénes somos. Pero, si no sabemos eso, vamos para cualquier lado”, sostuvo el historiador Norberto Galasso.
 
Asimismo, planteó: “La historia Argentina está mal enseñada, por un lado, porque prevalece la orientación mitrista y, por el otro lado, porque los chicos no llegan a analizar ni siquiera al yrigoyenismo y, mucho menos, al peronismo, que son cosas que están vivientes y sobre las cuales ellos van a  definirse”
 
“En definitiva, esta medida es un llamado al apoliticismo, que es lo que preconiza gente como Macri. No hay que discutir política ni proyectos, sino que todo es cuestión de gestión, algo que él tampoco hace muy bien”, criticó con vehemencia el intelectual, a la vez que destacó la reacción de alumnos y docentes que rechazaron la propuesta.
 
Respecto al abordaje de la materia en las escuelas secundarias, Galasso planteó: “Habría que darle a los estudiantes hechos concretos realizados por el Yrigoyenismo y por el peronismo y decirles que pueden ser interpretados de distintas maneras. Por ejemplo, que existen visiones conservadoras que consideraron a Yrigoyen un dictador y que le profirieron las mayores injurias”
 
“Los chicos deben saber esas cosas, saber de dónde viene la interpretación y reflexionar sobre eso, porque implica repensar su propia vida. Ahora que van a votar a los 16 años, es necesario que conozcan todo esto”, remarcó desde los micrófonos de “Ríos de tinta” en Radio Arinfo.
 
En otro plano, el historiador también se dio tiempo para analizar lo ocurrido en la denominada ‘Masacre de Ezeiza’, al cumplirse 40 años del acontecimiento que marcó a fuego al peronismo.
 
“Aquello fue una disputa que, si se lleva al plano ideológico, se entiende como la patria socialista que enarbolaban los jóvenes contra la patria del peronismo ortodoxo y derechoso que levantaba Manuel Osinde, que fue quien preparó el palco y estuvo a cargo de la represión. Desde otro punto de vista, podríamos decir que esa disputa fue por el palco porque, quien lo controlaba, controlaba el discurso de Perón. Es decir, si el palco estaba rodeado de 500 mil hombres representativos de la derecha peronista, se suponía que Perón iba a dar un discurso atermperado. En cambio, si el palco estaba rodeado por la juventud que venía de una marea social impresionante con el año 69 por el Cordobazo, Perón posiblemente haría un discurso de profundización de esa especie primavera peronista que se había vivido”, explicó.
 
A la hora de trasladar ese episodio a la actualidad, Galasso afirmó: “La lucha que allí se dio aún existe. Hoy hay un peronismo de nuevo tipo, que es el kirchnerismo, que asume la tradición del peronismo con características y perfiles propios y también hay un peronismo federal que está dispuesto a jugar un papel de tensión ante estos avances que se han producido. Que está dispuesto a juntarse con De Narváez o Macri, es decir, con la reacción”.
 
“El peronismo fue un movimiento importante y policlasista. De esta última característica proviene la fuerza de renovación, de empuje y de profundización de las medidas que se han ido tomando y, por el otro lado, están aquellos que se recuestan en posiciones conservadoras”, agregó desde el aire de Radio Arinfo.
 
El ensayista también hizo referencia a esta ‘moda’ revisionista de la historia que se erige en el presente: “Hoy hay una necesidad de no achicar la historia, como quiere Macri, sino de profundizarla y ampliarla porque estos procesos, en la historia mitrista, resultan muy infantiles. También es cierto que en ‘este barullo’ de la revisión aparecen muchas simplificaciones: uno se encuentra con personas que elogian a Mitre y también a Artigas y con otros que son Rosistas extremos pero que también aplauden al Chacho Peñaloza. Se trata de hacer una cosa seria, fundamentada y no improvisada. La revisión de la historia debe ser con fundamentos y coherente porque, si no, no se entiende nada”.
 
“Por todo esto es que hay que conocer historia. Para saber que Perón tomó medidas de avanzada como la nacionalización de los depósitos bancarios, que significa un golpe muy duro a los intereses financieros, o que también nacionalizó el comercio exterior, que significó un golpe muy duro a los grandes exportadores e importadores. Si no se sabe historia, como quiere Macri, el peronismo es solo un sentimiento”, concluyó.



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