Carolina Cingolani y sus Santos Negros despiertan sensaciones

Un repaso por su último e intenso show en el Viejo Abasto de la Ciudad de Buenos Aires

Crítica por El último romántico.

Mayo de 2013; es de noche en el Teatro del Viejo Mercado, local tradicional del Viejo Abasto. A media luz, el público espera, en medio de una oleada de fragancias que revelan  flores embozadas en la penumbra.

La bruma de colores del escenario se filtra entre las mesas mientras comienzan a vibrar los sonidos de los instrumentos cubanos.  El aire se carga de magia que envuelve. Los músicos de la isla antillana,  visten impecable blanco.

De repente, los acordes se hacen más fuertes, una bella figura  surge entre la bruma y  la noche se viste con la sensualidad de una voz femenina que impregna a los presentes de bolero.

Así comienza un espectáculo que genera una gama de estímulos, acorde con su nombre, “Despertando sensaciones”, con todo el encanto de Carolina Cingolani y sus Santos Negros. Los muy jóvenes Santos Negros son Yordanka Navarro, en piano, Oski Vidal, en bajo, y Raunier Ferrer (nieto de Ibrahim), en percusión.

Nostalgia y recuerdos flotan en el aire y se actualizan en los oídos de los amantes del género que asisten al espectáculo. Hombres y mujeres de toda edad vibran una y otra vez  ante la juvenil versión de “Somos”, “Soy lo prohibido” y “Algo contigo”.

No faltan los músicos invitados como el guitarrista Mauro Paulini quien acompaña en un tema jazz en castellano y Giselle, experta en el arte del saxofón. También, engalana la noche la presencia de la hija de Ibrahim Ferrer, Norma, quien entona, a dúo con Carolina, una suave melodía que alienta a no despertar a las flores.

Carolina Cingolani es una artista integral que sabe cómo halagar todos los sentidos de su público. Lo hace con luces, fragancias y hasta sabores, en exquisita combinación con la voz de la intérprete e invitados y los cautivantes sonidos tropicales.

Cuando las almas presentes se mecen rebosantes de placer, pensando que han pasado una noche muy especial, hacen su aparición expertos danzarines que deslumbran con el despliegue de movimientos étnicos.

Se trata de un espectáculo completo, armonioso y muy cuidado en todos los detalles, que busca sorprender y deleitar a cada momento a su concurrencia. Y lo logra, con el envolvente arte de su magia.

Afortunadamente, Carolina Cingolani y sus Santos Negros volverán a estar, el 31 de mayo a las 21, en el TEATRO DEL VIEJO MERCADO, Lavalle 3177, CABA.


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