“Hay que recuperar el valor de la política”

Sergio Bergman habló sobre su nuevo rol como Legislador porteño y reflexionó acerca de las pascuas que comienzan

En diálogo con el programa “Quiero a mi país”, el Rabino y Legislador de la Ciudad de Buenos Aires por el PRO repasó su actividad dentro de la política, pero también se hizo tiempo para hablar sobre su nuevo libro y sobre el significado de las pascuas que se acercan.

Desde Diciembre de 2011, Bergman integra el bloque de Diputados de la Ciudad del PRO, siendo parte de las Comisones de Educación, Ecología y Derechos Humanos. En relación a esta nueva función reflexionó: “La política es un espacio noble y no hay que confundirla con los hombres y las mujeres que no siempre la honraron, sino que la desprestigiaron y la degradaron. Hay que recuperar el valor de la política, que no es tarea fácil.”.

Asimismo, dio su punto de vista acerca del conflicto por el traspaso del subterráneo. “La ciudadanía necesita que Nación y Ciudad tengan una agenda convergente, pero no hay voluntad de que eso suceda. Hoy hay decisiones unilaterales impuestas por la mayoría automática del oficialismo en el Congreso Nacional para promulgar leyes que van en contra del espíritu de la constitución.”, aseguró y añadió: “Están segmentando la autonomía para tirarle por la cabeza a la ciudad aquello que se quieren sacar de encima, la autonomía es plena o no es. Cuando se quiera transferir algo, hay que hacerlo como dice la constitución: con sus recursos. Lamentablemente, si no hay un cambio desde el Poder Ejecutivo nacional, esto no va a tener solución.”

Bergman también hizo referencia a su nuevo libro titulado “Celebrar la diferencia. Unidad en la diversidad”. “Allí planteo un principio con el que todos acordamos: que lo diferente no es un obstáculo sino una oportunidad. Esta idea, más que declararla, hay que traducirla y actuarla. Hablo de esto como una celebración, porque no solo nos toleramos sino que nos aceptamos en la riqueza que nos aporta la diferencia.”, declaró el Rabino y amplió sus conceptos: “Si pudiésemos volver a los valores esenciales de lo humano, tendríamos más capacidad de desplegarlos ya que lo humano se va alienando. Tenemos la necesidad de volver a nuestro interior, a nuestro eje, no para encerrarnos sino para ofrendarnos y desplegar toda la potencia de la humanidad. Si vemos a lo espiritual no como religión, sino como energía, eso nos permite hacernos más humanos.”

En su calidad de religioso, Bergman habló acerca del significado de las pascuas y destacó los puntos en común en la significación entre el judaísmo y el catolicismo. “En la singularidad de cada tradición, sostenemos los mismos valores para evocar en esos días. El valor de la redención se expresa en la tradición judía a través de la libertad. La libertad no es que cada uno hace lo que quiere, sino lo que debe dentro de un sistema normativo que no nos limita, sino que nos expande.”, explicó. También analizó la celebración desde la tradición cristiana: “Allí se expresa la redención a través del amor y la figura de la compasión. El catolicismo hace hincapié en el acto de amor de quien para el judaísmo fue un rabino y un maestro y para la tradición cristiana no fue un hombre sino el hijo del mismo dios, encarnando al espíritu santo. Jesús, como cordero de dios, fue sacrificado para redimir los pecados de la humanidad y eso fue una acción compasiva que tiene que ver con volver a ser libres para elegir por el bien, por la paz, por la verdad y por una sociedad más justa y amorosa, que es el desafío de estas pascuas.”