“El de Baby Etchecopar es claramente un caso de legítima defensa”

El Dr. Alberto Cafetzoglus explicó el marco legal que se ajusta al caso del famoso conductor.



El violento asalto sufrido por el reconocido animador radial y televisivo, en el cual mató a un ladrón e hirió a otro, reavivó el debate público acerca de la legítima defensa y de la portación de armas por parte de la sociedad civil. A horas de que Etchecopar sea dado de alta, mientras su hijo continúa internado por los balazos recibidos, el Dr. Alberto Cafetzoglus pasó por “Mundo Norte” para dar su visión sobre el enmarcamiento jurídico de este caso.

 

“El caso de Baby Etchecopar es claramente una legítima defensa, pero en los medios se dicen muchas cosas que oscurecen este concepto e incluso lo confunden con la emoción violenta.”, manifestó el abogado y explicó muy detalladamente: “El delito es una acción anti-jurídica y culpable por definición. La legítima defensa excluye la anti-juridicidad y la acción se convierte en lícita, pero requiere de los siguientes elementos: que haya una agresión, que esta sea ilegítima, que uno no haya preconstituido una situación de peligro y, por último, que haya proporcionalidad entre el ataque y la repulsa. En este caso se cumplen todas estas situaciones: se mete gente armada a su casa y Etchecopar, que no tenía el arma a mano, finge un ataque cardíaco para agarrar la pistola. Finalmente comienza a disparar contra los delicneuntes, quienes tenían capacidad de fuego y eran dos, matando a uno e hiriendo a otro”.

 

El Dr. Cafetzoglus diferenció al concepto de Legítima Defensa del de emoción violenta y aclaró: “La emoción tiene que ver con la culpabilidad y esta deviene de la situación psíquica. El delito se concibe como un área de libertad. Hay dos áreas del psiquismo que están en juego: una es la intelectiva (si comprendo la criminalidad de lo que hago) y la otra es la volitiva (si estoy en condiciones de dirigir mis acciones). Cuando se dan esas dos hay culpabilidad, pero esta se atenúa si estoy en un estado de emoción violenta.”. “Si la emoción llega a ser tan importante que desconecta la corteza cerebral del resto del cerebro y el hombre actúa automáticamente, se excluye la culpabilidad porque deja de ser un acto delibertad.”, dijo.

 

Asimismo, el Presidente del IOPI (Instituto para la Observación y Prevención de la Inseguridad) manifestó su opinión respecto al debate generado en la sociedad y entre los juristas a partir de este hecho: “Los abolicionistas y garantistas hablan de desarmar a la sociedad civil y dicen que es riesgoso tener un arma en la casa. Es estúpida e ingenua esta campaña de desarme de la sociedad civil con todos los casos de inseguridad que se están sucediendo.”.

 

Finalmente, Cafetzoglus expuso su punto de vista sobre el impulso al juicio por jurados que se ha propuesto en la Provincia de Buenos Aires: “Según el derecho internacional incorporado a la constitución, una de las garantías del debido proceso es que el fallo sea fundado y en el juicio por jurados eso no sucede. Allí solo se pregunta si existe el hecho criminoso y cómo se considera al imputado pero no hay fundamentación, lo que impide la posibilidad recursiva. No se puede discutir un fallo si no se conocen las bases de la decisión del jurado.”, opinó el abogado.


 
Comentarios
Enviá tu Comentario